Tenemos en cuenta durante todo el proceso de producción del AOVE nuestro compromiso por el medio ambiente y por preservar el entorno que nos rodea. Por ello, llevamos a cabo una serie de prácticas que ayudan a aprovechar cada residuo que pueda ser generado durante la elaboración.

Destaca la fabricación de biomasa con los huesos de aceituna, usada como fuente energética; las hojas encontradas tras la limpieza son utilizadas por compañeros ganaderos de la zona para sus animales; la tierra y hierbas para procesar compost o composta, que sirve como abono orgánico; incluso las pequeñas piedras o chinos que se separan se aprovechan para evitar el barro en los carriles y caminos.